Una prueba de percepción visual evalúa la capacidad de un individuo para procesar e interpretar la información visual. Esto incluye la evaluación de habilidades como la discriminación visual, la memoria visual, las relaciones espaciales y otras capacidades perceptivas visuales críticas.
La prueba ayuda a identificar los puntos fuertes y débiles en estas áreas, lo que puede ser crucial para diagnosticar problemas de aprendizaje, lesiones cerebrales y otras afecciones del procesamiento visual.











