Para crear una Plantilla Iceberg, divídala en dos secciones principales: la punta y la parte sumergida. La punta, más pequeña y visible, representa los aspectos superficiales o inmediatamente evidentes de un tema. Debajo de ella, la sección sumergida, más grande, ilustra factores o causas más profundos y subyacentes que no son inmediatamente visibles.
Esta plantilla puede adaptarse a diversos temas identificando los resultados o problemas visibles (la punta) y explorando después las causas o influencias ocultas (la parte sumergida). La Plantilla debe ser lo suficientemente clara y espaciosa como para permitir descripciones detalladas en ambas secciones.











